10. Información útil y consejos

http://www.pedroymariporlemundo.blogspot.com/

Esta página la dedicaré a intentar ayudarles a que tengan información útil lo más actualizada posible, por si algún día necesitan información para viajar por China, basada en nuestras anécdotas y curiosidades.
Yo mismo busqué, en foros y en blogs de otras personas, información que me fuese útil para moverme por allí. Aunque hay poca y de hace unos años, que ya China no es igual, me ayudaron a tener una idea de los sitios interesantes a visitar además de los que todo el mundo ha oído hablar, y de más o menos, como llegar hasta ellos.
Espero que con este, ya tengan otro sitio donde mirar.

Llegar a China.

Avión. No os aconsejo la bicicleta, te cansarías mucho solo para llegar.
Ahora en serio, aunque sea un poco más caro, nosotros, primero, decidimos los sitios que nos interesaba ver, y con ellos trazamos sobre el mapa una línea, que nos hiciese empezar por uno de ellos (el mejor conectado) y salir por el último(el otro punto mejor conectado), para no tener que repetir sitios y poder "alargar" mejor la visión global un país tan grande. Si se busca con tiempo, la diferencia de precio de un billete "ida y vuelta" con la de un solo trayecto, no es tanta y compensa. Por lo menos a nosotros nos resultó.
El primer reto que te planteas, es la meta, donde hay que llegar a tiempo el día y a la hora, para conseguir el avión y volver a casa. Esa es la aventura. La cantidad de cosas que veas en medio, dependerá de la suerte, de la habilidad, del clima, de lo que te apetezca hacer y de otros múltiples factores. Todo lo que puedas ver, estará bien. No hay que frustarse si no puedes ver algo, porque seguro que verás otra cosa que no esperabas y suele mejorar lo perdido. Es un hecho "casi matemático".
Esta forma de planear el recorrido, por ejemplo, nos hizo llegar a la conclusión, de que según vas descendiendo por la geografía China, la cultura y la manera de entender la vida de sus gentes, se va pareciendo cada vez más a la nuestra. El "choque" de "filosofías", nos resultó un poco duro nada más llegar a Pekín. Después la cosa fue mejorando, o por lo menos la fuimos asimilando y entendiendo mejor, hasta llegar a ciudades como Shanghai y por supuesto Hong Kong, donde son igual de "capitalistas-consumistas" que nosotros.

El transporte en China.
1º - Como desplazarse de una ciudad a otra.

Depende de las distancias. Yo recomiendo, trenes nocturnos, si el trayecto dura la noche y llegas a destino por la mañana. Son baratísimos y un ahorro. Te ahorras no solo el día de trayecto, sino el dinero que tendrías que invertir en un hotel para pasar la noche.
En litera dura, se duerme razonablemente bien. Hay que intentar conseguir las literas inferiores, ya que, aunque son donde se suele sentar la gente, se van cuando ven que son tuyas, y dan un poco más de espacio que las superiores, pudiendo sentarte cómodamente y puedas viajar no solo echado todo el tiempo.

Si la distancia es muy larga y los horarios de tren no son nocturnos, sino que se te alarga más de doce horas, recomendamos sin dudarlo el avión, que es un medio rápido, moderno y barato comparado con lo que pagamos aquí en occidente.
También puedes usar autobuses de largo recorrido, que a veces son más rápidos que los trenes, otras veces son un palizón. Los hay nocturnos, pero no los recomiendan mucho, por el hábito tan grande de fumar de los chinos pasajeros chinos, y por las carreteras, que no están en muy buen estado y son muy peligrosas, también por otro peligroso hábito chino, esta vez, el de conducir como locos.

Si les coincide, como a nosotros, otra manera de "ahorrar" haciendo cosas, es viajar en barco por los ríos. Cuando hicimos el Yangsté, lo calculamos para ir acercándonos a Shanghai desde Chengdú. Fuimos en guagua desde la primera ciudad, hasta Chongqing. Hicimos el crucero que desembarcaba, en Yichang, y allí tomamos otra, hasta Wuhan, donde encontramos un mejor precio para volar. Todo ese trayecto, casi en línea recta, cruzando de este a oeste del país.

Los billetes, se pueden conseguir facilmente en los albergues, con unas comisiones de risa. Nos llegaron a pedir 4Y por cada uno, unos 0.50€...También se pueden conseguir en las ciudades, en los Cits, (Centros de información y Turismo), que están repartidos a lo largo de todo el país. Y como último remedio, pero el más difícil, en las propias estaciones de trenes y buses. Allí hay que buscar a alguien que "chapurree" inglés y después pelearte con los chinos para que no se te "cuelen", ya que ello no saben o no quieren entender, lo que es el respeto por el que llegó antes. De todos modos, los vendedores, suelen ser serviciales e intentan ayudarte. Hay una página en internet, por si se les da bien, donde se pueden informar de precios y horarios de trenes. Yo no la usé, pero aquí la tienen por si se os ofrece: http://www.travelchinaguide.com/

Los billetes de avión, lo mismo. Nosotros compramos alguno por internet en los propios hoteles, en http://www.elong.com/ , cosa que lo hizo aún más fácil si cabe.

2º - Desplazarse en las ciudades

Sin duda, en las grandes ciudades que lo tengan, como Shanghai y Hong Kong, el metro. El de Pekín no lo usamos. Los otros dos, son baratos, rápidos, modernos, eficaces y todos los buenos adjetivos que quieran ponerle. Impresionantes, a la par que sencillos de usar. Basta con seguir las instrucciones de las máquinas expendedoras de tickets y los colores de las líneas, que están bien señalizadas en inglés, por todos lados, para llegar a cualquier destino sin perderse.

En la superficie, sin dudarlo también, el taxi. Por lo general, los taxistas son  muy honrados, aunque por si acaso, siempre hay que estar pendiente de que "bajen la bandera". Son muy baratos también, solo un euro o un par como mucho al cambio. Cuando terminan la carrera, te emiten un justificante de recibo que da el taxímetro. La aventura, es conseguir uno en las horas puntas...Hay que colocarse donde más o menos veas que se pueden parar a descargar el pasaje y antes de que éstos salgan, pegarse a la puerta para que nadie se te cuele. Desde que los ocupantes bajen, mientras uno se "tira" literalmente dentro, porque si no, se te cuelan seguro, el otro le enseña la dirección del lugar al que quieres ir. Es recomendable pedir la tarjeta al alojamiento en el que estés para este fin o tener la dirección escrita en su idioma.

El autobús público. Para una persona como yo, con "deformación profesional", es un reto apasionante moverse en guagua. Es lo más barato. Si bien es muy difícil saber cuál es la que va al sitio que quieres ver. Si lo averiguas, es superdivertido ir "apretujado" entre un montón de chinos, que te miran y cuchichean entre ellos, como si fueses una estrella de rock.

Los motocarros. Yo los desaconsejo, salvo para darse el capricho de montar en uno. Son mucho más caros que los taxis y antes de subirse a uno, hay que regatear a fondo el precio. Nunca subirse y luego preguntar, te darán un buen "palo". Normalmente, aunque hayas llegado a un acuerdo antes del trayecto, al finalizarlo, te volverán loco para que les des más de lo convenido.


Cruzar, a lo chino.

De esta manera, bautizamos, la acción de cruzar la calle en una ciudad de China. Normalmente, las calles de las ciudades, son inmensas avenidas de tres, cuatro y más carriles por sentido. Éstas, tienen pasos de peatones, pero nadie los respeta. Muchas veces, no respetan ni los semáforos. Cruzar la calle por tanto, es una acción, de incalculable riesgo. Nosotros, aprendimos observando a la gente. Es lo mismo hacerlo sobre el paso de peatones como por cualquier lado. Desde un extremo de la vía, la gente se para y cuando en el carril más próximo a ti, hay espacio suficiente para llegar a la línea que delimita el otro carril, corres y te sitúas en ella, pisándola. Estarás un ratito, entre el tráfico que discurre entre los dos carriles, pero tranquilo, ésto es de lo más normal allí, solo hay que observar la cara de la gente, de lo más tranquilos. Nadie toca la pita, nadie se enfada. Desde que veas el espacio en el siguiente carril, repites la operación, y vas repitiendo hasta llegar al otro extremo.
No se te ocurra, por tu inercia occidental, "saltar" al paso de peatones sin haber mirado bien antes. Más de un susto nos llevamos por ir despistados a cruzar sin mirar bien. Y, aunque el carril sea de un sentido, mira bien para los dos lados, pues es de lo más normal , que algún coche o motocarro, se meta a circular, en dirección prohibida. De los scooters, ya no te voy a contar nada. Dicho lo dicho, lo imaginarás.


Dinero en efectivo.

Al "lorito" en donde pagáis con la tarjeta. Muchas veces intentamos pagar con ella y muchas veces no "establecía conexión", por lo que acabábamos pagando en efectivo. Ya les contamos el incidente del primer día en Pekín, en el restaurante en el que se "equivocaron" en la cuenta y nos sumaron "sin querer" un cerito a la derecha y luego, de darnos el ticket...En los hostales, tampoco aceptaban tarjetas...
La solución es pagar en efectivo. Es un engorro cargar dinero, pero es muy fácil cambiar en los bancos, y las comisiones de estos, son de risa. Un par de céntimos de nuestra moneda. Eso sí, en los grandes bancos hay que hacer colas para el cambio de divisa. Pero en las sucursales menos céntricas, nada.
Cuando se acaban, en nuestro caso, los Euros, se puede sacar en los cajeros de los principales bancos dinero local (hasta 2500 Yuanes máximo en la China continental y hasta 2000 DHK en Hong Kong) y, aunque el banco emisor no os cobra comisión, curiosamente el tuyo, el de aquí, te "clava", primero un 3% de comisión por la transacción entre bancos y luego, una cantidad cercana a 15 €, por conceptos de averigua tú el qué...(¿pensaban que en el primer mundo en el que vivimos se roba menos? La respuesta es que todo lo contrario...)

Los baños chinos.

La peor herida de guerra, el peor recuerdo de todo lo malo que se pasa en este tipo de viajes, en China, son los baños. A pesar de que presumen de haber inventado los servicios, los chinos, por lo que se ve, jamás intentaron mejorar sus primitivos y rudimentarios sanitarios.
Los albergues, hoteles y restaurantes "modernos" tipo KFC, ya están provistos de retrete occidental. El resto de sitios suelen constar, como mucho pedir, del "plato con agujero" que se veía por aquí hace décadas. 
En casi la totalidad de los demás emplazamientos, ya fuesen estaciones de trenes y buses, o edificios públicos, constan de un suelo con baldosas, incluso simple cemento pulido, con una zanja con un poquito de desnivel, en donde se "acuclillaban" los usuarios (a vista de todo el mundo, ya que ellos no suelen usar puertas), para "verter" en ellas sus "desechos". Con muchísima suerte, el desnivel de la zanja tenía además un mínimo chorrito de agua, pero normalmente, al ser insuficiente con esto, estaban llenas de auténticos montículos de porquería.
No dejaba de ser curioso ver a toda aquella gente haciendo sus cosas, mientras mandaban mensajitos por el móvil sin inmutarse de nuestra cara de asombro, pero ni que decir, del pestilente y nauseabundo olor, que provocaban arcadas antes incluso de entrar.
Nuestra recomendación, es que lo que haya que hacer, procurar hacerlo antes de salir, y si no, buscar un Mconalds o KFC, y en casos de extrema necesidad, si no hay más remedio, hay que echarle valor, tomar aire profundamente, remangarte los pantalones y aguantar la respiración todo lo que se pueda. Avisados quedan.


Where are you from?

No se dejen engañar, detrás de esa frasecita para entablar conversación y de esa encantadora sonrisa, ni hay intento de amistad, ni curiosidad, ni nada de nada. Lo único que hay detrás, es un vendedor/a de algo que te ha visto la cara de "guiri".
Siempre te entran de esa manera, y aunque se usa en todas las partes del mundo, aquí, con practicada sutileza, siempre te la lian.